1995─

Cuando haces preguntas y nadie responde. Cuando decís hola y te dicen chau. Cuando crees que amas pero no es más que algo utópico. Cuando sentís celos y lo único que haces es acumularlos. Cuando querés parar y no podes dejar de correr. Cuando crees que todo termino pero recién es el principio del fin. Cuando comprobas por tus propios medios que uno "solo conserva lo que no amarra". ¿No sentís decepción? ¿Ganas de decir de una vez por todas BASTA? Cuando querés poner un punto y aparte pero no se puede, hay comas. Cuando crees que la historia se termina, pero quedan 15 capítulos más. Cuando crees que ya hay que bajar, pero queda una hora de viaje. ¿Qué se siente? ¿Se siente algo? Nunca somos capaces de poder regular esas cosas. Es como si así estuviese escrito. Como si quisieras regular tu ritmo cardíaco pero esta esa autonomía inconsciente que no lo permite. ¿Qué es lo que pasa? Será que desbordamos, sea de alegría, tristeza. O quizá será que de una vez "tiramos la toalla". Es como si quisieras sacar una foto, pero el foco, el gran angular, el zoom, o cualquier otra cosa como querer ubicar algo que no se puede, que queda mal, que quiebra la imagen. Es como una pieza en el rompe cabezas que no encaja, que no tiene lugar en la escena. ¿Qué es eso? ¿Llegamos a sentirnos así alguna vez? Somos tan susceptibles, tan manipulables. ¿Qué es lo que nos pasa? ¿Nos cansamos y decimos "ya esta, hace lo que quieras"? ¿Cómo llegamos a esto? Si alguien sabe que por favor levante la mano y me lo explique porque yo no puedo más. No puedo más con esta mentira, no soporto que digan SI y después NO. ¿Cómo el hombre pudo encerrarse en la rutina y volver a la monotonía? ¿Por qué llegamos a la falta de variedad? Nos convertimos ¿En qué? Esa es la pregunta ¿qué somos? ¿en qué nos convertimos? Es así como llegamos una vez más al ¿principio? de este gran círculo. Así llegamos a hacernos preguntas que nadie nunca va a contestar. A decir hola y que nos digan chau. A creer que amamos cosas que son solo utopías. A sentir celos y acumularlos. A querer parar y seguir corriendo. A creer que las cosas se terminan cuando recién empiezan. A comprobar, a darnos contra la pared, y aprender que "uno solo conserva lo que no amarra". A sentir decepción. A tener ganas de poder decir (y gritar) BASTA. Y sentir que te acercas al final de la historia y te quedan más capítulos por leer. A darte cuenta que te falta viaje, que acá la cosa no se termina.

-¿HOLA SI? NO QUIERO SER COMO VOS-

No damos pie
entre tanto tic tac,
entre tanto Big Bang.