Princesa bacana,
sexo, marihuana y milongón.
Yo cuelgo de tu ombligo
así que no juegues conmigo, tus juegos de salón..
Mueve tu primero
que yo aquí te espero,
anticipando el tacto de cada labio de tu beso..
Princesa haragana,
¡qué fin de semana!
Princesa dormida yo bajo a por algo de comer. Regreso, y princesa ya ha puesto la mesa; la cama es el mantel... Prueba tu primero que yo aquí prefiero mirarte sonreír frente a ese plato de cerezas... Brindemos, princesa, por esta (brutal) pereza...
No hay comentarios:
Publicar un comentario