-Ya ve -dijo el padre Brown, parpadeando con modestia-, no creo que la alegría de Armstrong fuera tan alegre para otras personas. Uno diría que nadie podría matar a un anciano tan feliz, pero no estoy seguro; ne nos inducas in tentationem. Si yo alguna vez asesinara a alguien -añadió con bastante sencillez-, me atrevo a decir que sería a un optimista.
-¿Por qué? -exclamó Merton, divertido-. ¿Usted cree que a la gente no le gusta la alegría?
-A la gente le gusta la risa habitual -respondió el padre Brown-, pero no creo que le agrade una sonrisa permanente. La alegría sin humor es una cosa desquiciante.

Los tres instrumentos de la muerte
G. K. Chesterton.










La expresión latina ne nos inducas in tentationem significa "no nos dejes caer en la tentación" y pertenece al Padre Nuestro.

1 comentario:

María Emilia dijo...

qué lindo estar de vuelta! Veo que todo está muy cambiado por acá, pero ya voy a volver a encontrar mi lugar para pasar a visitar cada vez que pueda.