podríamos
elegir vivir sin vivir o vivir viviendo. podría decirte lo mucho que te
necesito podría callarme podría salir a buscarte. O podría quedarme quieta como
el velador amarillo que ilumina la esquina de la habitación que está vacía.
Podría quedarme quieta como el velador amarillo y ver la vida pasar y no vivir.
El velador amarillo no sabe mucho de la vida. Y yo tampoco.
No hay comentarios:
Publicar un comentario